miércoles, 9 de febrero de 2011

Unidad 1 - Conociendo el libro de Salmos


¿Ustedes ya aprendieron aquí en la EBI sobre el libro más especial del mundo, no es cierto?¿Ustedes se acuerdan de este libro? La Biblia, muy bien. Y hoy ustedes van a aprender ms obre uno de los libros poéticos, muy conocido, creo que uno de los más conocidos de la Biblia, y hasta quien no suele leer mucho la Biblia ya debe haber oído sobre él. ¿Saben de qué estoy hablando? Estoy hablando del libro de Salmos.
Muchas personas tienen en sus casas el Salmo 23, que dice: El SEÑOR es mi pastor y nada me faltara…” Este libro es uno de los versículos del Salmo más leído.
El Libro de Salmos está lleno de oraciones, canciones y agradecimientos, compuesto por 150 capítulos y el mayor Salmo el 119 con 176 versículos. ¿Cuántos versículos tienen niños? Todos llenos de grandes enseñamientos para nosotros.
Un libro tan grande y tan bendecido debe haber llevado mucho tiempo para estar listo… ¿No es cierto? Saben niños, se cree que este libro llevo centenas de años para quedarse listo por completo de la forma que lo conocemos. Los Salmos eran muy usados como canciones en los cultos realizados en los tiempos bíblicos y todavía en los días de hoy.
Así como otros libros de la Biblia, los Salmos también fueron escritos por hombres inspirados por Dios. Estos hombres eran conocidos como salmistas, el rey David era uno de ellos quién escribió la mayoría de los Salmos. Ellos usaban varios instrumentos musicales para cantar y bailar en alabanzas a Dios. Uno de los líderes del Coro de David, se llamaba Asfé y Coré, pertenecían a una familia de músicos oficiales. Ellos también escribían algunos Salmos.
Desde jovencito, David era diferente, Dios lo escogió porque tenía un corazón humilde y temiente, alababa a Él con alegría y tenia placer de estar en la Casa de Dios. Solamente alguien tan especial seria inspirado por Dios para escribir el mayor libro de la Biblia.
David era un simple pastor de ovejas. El pastoreaba las ovejas de su padre con dedicación y mucho amor. Dios no tuvo dudas al escogerlo para ser el rey de Israel, pues alguien tan celoso y cuidadoso con las ovejas actuaria de la misma manera con su pueblo.
Así como David alababa a Dios, nosotros también debemos alabarlo. Y el libro de Salmos no enseña a alabar a Dios del modo que Él merece. ¿Qué tal si comenzamos a alabar a Él como el Salmo 100?



Salmo 100

Celebre con júbilos al Señor
Todos los moradores de la Tierra
Servid al Señor con alegría,
Presentándote al Señor con canticos
Sabéis que él Señor es bueno
Y eterna es su bondad y su fidelidad
De generación en generación
Aleluya, glorias, aleluya!
Celebre con júbilos al Señor
Todos los moradores de la Tierra
Servid al Señor con alegría,
Presentándote al Señor con canticos
Sabéis que él Señor es bueno
Y eterna es su bondad y su fidelidad
De generación en generación
Aleluya, glorias, aleluya!

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